Implementamos una metodología de trabajo que nos permite trabajar en diferentes clústers que nuclean a diferentes personas en función de sus tareas. Cada grupo funciona de manera autónoma: define sus objetivos, su metodología de trabajo, la frecuencia de sus reuniones y sus honorarios, todo puertas adentro.
Cada clúster cuenta con la autonomía necesaria para poder cumplir con sus responsabilidades y poder alcanzar sus objetivos de manera independiente al resto del equipo.
En una estructura horizontal es fundamental poder fomentar la comunicación constante y crear espacios donde poder interactuar con el resto del equipo.
Todos somos responsables de tomar decisiones que nos permitan cumplir con nuestros objetivos. Es fundamental entender que el esfuerzo lo hacemos entre todos, los logros y los fracasos son de todo el equipo.
Muchas veces, las organizaciones toman decisiones sin tener en cuenta muchos factores. En Ideas Factory, tomamos las decisiones en conjunto. Esto nos invita a ser parte de un equipo que celebra los logros y los fracasos como un esfuerzo colaborativo donde cada uno cumple con su objetivo. Esta libertad tiene muchas ventajas pero conlleva mucho compromiso.
En IDF creemos que la manera es probar y ver cómo funciona. Siempre le decimos a nuestros emprendedores que no tarden en salir a la cancha, aunque tengan vergüenza de sus prototipos… porque de esa manera aprenden de sus usuarios, de sus clientes… nosotros estamos probando, midiendo, aprendiendo… todavía queda mucho camino por recorrer.